No eres hombre si no comes carne

Noelia Alonso

Desde niños se nos ha implantado la idea de que hay que comer de todo, sino, no creceremos sanos y fuertes. Seguro que habréis escuchado la frase: “No eres hombre si no comes carne”. Precisamente, este tipo de tesis son las propias del ideal patriarcal.

Las mujeres comiendo ensaladas, preocupándose por su dieta y su peso para verse dentro del cuerpo aprobado por la sociedad, mientras que con los hombres sucede todo lo contrario. A ellos, sí se les permite comer toda la carne que quieran, sino se les califica como “flojos”. De hecho, esta situación la vivimos en los propios bares cuando en la hora del almuerzo son ellos los que se piden los bocadillos especiales de carne de caballo y lo hacen en conjunto, en unanimidad. Es experiencia propia, soy camarera los fines de semana.

La situación se complica cuando yo, como mujer, cuento con amigos que rompen con esta regla arcaica. Y es que, cada vez es mayor la conciencia animalista para luchar por los derechos del resto de seres vivos que habitan nuestro planeta. Al fin y al cabo, somos nosotros como seres humanos los que estamos llevando al mundo a su secuencia fílmica más trágica. Matamos animales para alimentarnos, pero también los reproducimos en ganaderías que son el principal foco de contaminación de dióxido de carbono (CO2) para nuestro medioambiente. Además, no hace falta que os diga que estamos en una verdadera emergencia climática, ¿no?

Con esto, veo imprudente seguir con ese punto de vista “machirulo” de seguir con la norma bien vista. Si un hombre quiere ser pesci-vegetariano, flexitariano, vegetariano, vegano o frugívoro, hay que dejarlo estar y que viva su propia experiencia nutricional. Si ha decidido emprender esa aventura alimenticia, será por algo. Atormentar a una persona por lo que come, es también bullying, sí. Del mismo modo, es acoso el hacer un sinfín de preguntas a aquellos que no comen carne. Si no comen carne, ¿qué pasa? ¿Te ocurre a ti algún problema porque esas personas no coman carne? Te respondo: no.

Es conveniente destacar que esas personas estarán mucho más fuertes que tú porque reducen la probabilidad de tener enfermedades cardiovasculares, así como de contraer altos índices de colesterol o diabetes. A su vez, cuentan con fuentes nutricionales de alta potencia proteica como pueden ser las legumbres o los derivados de la soja. Así que, esa educación de comer de todo que nos han creado en la mente desde pequeños y que ha originado comportamientos más aproximados hacia la vena machista, es totalmente infundada. Si eres hombre y decides no comer carne, no te preocupes, vas a crecer (y estar) más sano que aquellos que te critican por no hacerlo. Y a quien no le guste, oídos sordos.

Artículo de opinión elaborado por Noelia Alonso.

#educaciónalimentaria #alimentaciónsaludable #opinión #veganismo